Con una significativa reunión entre pacientes y el equipo médico, el HGGB conmemoró el día Internacional del Implante Coclear, fecha en la que se recuerda la primera implantación en 1957, realizada por los doctores franceses Djourno y Eyrès.
El Hospital Regional de Concepción es el único centro asistencial de Santiago al sur capacitado para realizar cirugías de implante coclear, permitiendo la recuperación paulatina de la audición en pacientes con sordera profunda o severa, cuando ningún otro tratamiento ha sido eficaz.

Hace 10 años, Pamela Lazo fue madre por primera vez. "Al año tres meses a mi hija le diagnosticaron una sordera profunda. Me di cuenta porque era demasiado callada y no reaccionaba cuando yo la nombraba", comentó.
Según cuenta Pamela, hace 10 años la realidad respecto al tema no era igual a hoy. "Investigué en Internet y supe de los implantes cocleares, pero fue grande mi desilusión al ver su alto costo. Luego me contacté directamente con el Ministerio. Daban 10 implantes al año en el país. Postulé, y mi hija fue la primera beneficiada en Concepción".
En 2010 Pamela tuvo a su segunda hija; Rocío, quien nació con el mismo problema de su hermana. "Ella esperó 2 años para concretar su implante, y veo la diferencia respecto a Sandra, respecto a su voz y la forma de sociabilizar. A menor edad, mucho mejor el resultado".

"El implante le cambió la vida a mi hijo"
Fabiola Villarroel es la hermana de Sebastián, de 18 años. "Tenía 12 cuando nació mi hermano. A los 3 años le diagnosticaron su problema de sordera y durante mucho tiempo estuvo en terapias y aprendiendo lenguaje de señas".
"Hace dos años vimos en las noticias el tema del implante y nos desilusionamos al saber que sólo era para recién nacidos o niños muy pequeños. De todas formas postulamos y en marzo de 2015 Sebastián fue implantado".

Fabiola es clara al mencionar que es difícil avanzar en la sociedad sólo con el lenguaje de señas, opinión que comparte María Angélica Valenzuela, madre de Oscar, de 5 años, quien recibió el implante hace un año y 5 meses. "El implante le cambió la vida a mi hijo. Sin embargo, es importante que la gente entienda que oír es un derecho y no un lujo. Es importante aceptar a una persona sorda y que existan alternativas para continuar con el proceso de los implantes, ya que cables, reparaciones y mantención, son gastos que asume cada familia, y que no son menores".

"Estas fechas nos ayudan a crear conciencia"
El doctor Ricardo Alarcón, otorrinolaringólogo a cargo del grupo de Implante Coclear, comenta que aún quedan varias tareas pendientes. "Cada una de estas fechas, como el Día de la Hipoacusia o del Implante Coclear, son instancias interesantes y que ayudan a crear consciencia en la gente sobre el generar estrategias e infraestructuras para incorporar a la sociedad a las personas con problemas de sordera; siendo un aporte y no una carga".

Alarcón explica que todas las implementaciones auditivas son caras y naturalmente la de mayor valor es el implante coclear. "Los programas del Ministerio cubren la operación y el aparato, el cual cuesta entre 18 y 30 millones de pesos, dependiendo de las necesidades del paciente, sin embargo, en 5 o 7 años más nos encontramos con el problema de cambiar el procesador y cada uno de ellos cuesta cerca de 7 millones de pesos".

Existen diferentes vías para acceder a un implante coclear. A partir del 1 de enero de 2013 todos los recién nacidos en Chile con diagnóstico de hipoacusia, antes de los 2 años, están cubiertos por el GES y se les garantiza la implementación auditiva y la rehabilitación, ya sea con audífono o implante.

Desde el 1 de enero de 2013 hasta la fecha se han realizado 40 implantes cocleares en el HGGB. "Es una cirugía bastante normada casi con ningún inconveniente. Lo que queda pendiente como grupo es trabajar con los hospitales que nos refieren los pacientes para hacer los diagnósticos. Es imposible hacerlo sin un programa de screening auditivo. En el HGGB lo tenemos hace unos años cumpliendo los estándares internacionales, sin embargo, lamentablemente, no lo tienen todos los hospitales que cuentan con maternidad, lo que permitiría pesquisar a los niños sordos prontamente", planteó el especialista.

Para que un paciente implantado recupere con éxito su audición se requiere un proceso de rehabilitación integral, que incluya psicólogo, fonoaudiólogos, asistentes sociales, tecnólogos médicos, médicos otorrinos, etc. "Nos queda acercar las unidades de rehabilitación a los pacientes de otras comunas y difundir el trabajo en la comunidad, para generar infraestructuras que permitan incorporar a los sordos a la sociedad", concluyó Alarcón.