Un salto tecnológico en impresión 3D dio el hospital, con la incorporación de un moderno equipo que ya está en operaciones. 

Claudio Wandersleben, jefe de la Unidad de Equipos Médicos, hizo la presentación en sociedad, que una vez armado, mostró  sus dotes con la entrega de piezas pequeñas, de excelente resolución y precisión. 

“La diferencia tecnológica entre la que usábamos antes y la nueva sorprende. Hasta la semana pasada sólo podíamos imprimir y elaborar  piezas   grandes,   con   poco   detalle.

Ahora, frente a una falla de equipo médico, podemos reparar rápidamente. Esto es entre una y tres horas. Lo que más demora es el diseño y elaboración de la pieza”, explica. Desde ahora, cualquier pieza plástica incorporada a un equipamiento clínico puede reemplazarse, mediante impresión 3D, gracias a una inversión cercana a los 400 mil pesos que permite ahorrar millones, concluyó el profesional, quien valoró la decisión de los directivos para concretar esta adquisición.