HGGB y Gendarmería afinan protocolo de salud y seguridad
Lunes, 25 de Septiembre de 2023
El traslado de personas privadas de libertad y su custodia, por parte de Gendarmería de Chile, no restringe su derecho a atención de salud ni tampoco acceso a diversas prestaciones. Frecuentemente, no resulta novedoso ver custodios color verde boldo por los pasillos del Guillermo Grant, trasladando imputados, con la clásica casaquilla amarilla e incluso, engrillados. Cuando se trata de casos a los que la institución denomina PPR (Población Penal de Riesgo), ya sean de alta peligrosidad y mayor connotación pública, los gendarmes también portan armamento de mayor calibre y visten uniforme negro, que corresponde a la Usep: Unidad de Servicios Especiales Penitenciarios, según detalló Alfonso Reyes, teniente 1ero., del Complejo Penitenciario Biobío (CPB).
Este complejo carcelario tiene una infraestructura con capacidad para 3 mil 34 internos. Hay 2 mil 400 reos y de ellos, 128 internos categorizados como PPR, por lo que urge planificar, unificar y poner en práctica estos protocolos de gestión interna interinstitucional.
Detalles como los descritos fueron parte de los temas aclaratorios que se trataron en una de varias reuniones que se están sosteniendo entre nuestro establecimiento y Gendarmería. Por su parte, profesionales del área de Enfermería expusieron acciones cotidianas que los uniformados, una vez en el hospital, deben acatar. Como no pueden ni deben dejar nunca solos a las y los imputados, cuando ingresar a tomarse un examen radiológico, por ejemplo, también deben desprenderse de algunas pertenencias: elementos metálicos, armas, esposas, radios o celulares que puedan hacer interferencia con el equipamiento clínico, por mencionar una situación puntual. Conocer los accesos más directos y menos frecuentados para evitar la exposición del imputado al público general o frente a niños y niñas que, mientras esperan atención junto a sus padres, se expongan a ver armamento real, por ejemplo. “Todo cuando sea posible mejorar, es el objetivo primordial de ambas instituciones. El próximo miércoles tendremos una reunión con nuestros directivos para exponer el protocolo que estamos afinando y socializando con ellos. Intercambiamos teléfonos de contacto también a fin de que todos sepamos qué hacer cuando se realicen traslados al HGGB”, comentó Josefina Castillo, enfermera supervisora de Unidad de Emergencia de nuestro hospital.
El teniente coronel y jefe operativo del CP Biobío, Néstor Flores agregó: “La idea es mejorar todos los procesos de derivación de internos y aspectos de seguridad de los dos servicios, que son relevantes, no sólo para el propio interno sino para nuestros funcionarios, los del hospital y usuarios en general”.
El uniformado dijo que, en 2016, hubo intentos de protocolizar con Higueras y con el Psiquiátrico, pero es necesario actualizar aquello, sobre todo con el Hospital más grande de la región.