Se casaron en Servicio de Otorrinolaringología HGGB
Miercoles, 11 de Octubre de 2023
“Mi esposo me lo pedía, pero yo me negaba”. Fue lo primero que respondió Lilian Uriarte al ser consultada por el matrimonio civil que protagonizó junto a su, ahora cónyuge, Richard Véliz, en la sala 4 del Servicio de Otorrinolaringología.
Las nupcias ocurrieron exactamente hace una semana, sorprendiendo a todo el personal que desempeñaba labores en las cercanías del sector. Pocos habían sido notificados de lo que estaba por ocurrir. “Él le había pedido varias veces matrimonio, pero ella le decía siempre que no. ¿Para qué?”, contó Claudio Soto, quien además de sus labores como kinesiólogo, aquel miércoles 4 de octubre, ofició como parte del staff de improvisados fotógrafos.
“Me negaba porque él siempre ha sido un gentleman, el tipo de hombre que sirve la mesa, con velitas y todo romántico”, sinceró Lilian. El miedo a perderlo de forma definitiva se apoderaba de ella al pensar en el sí definitivo. Pero su galán debió ser internado una vez más en el HGGB, donde lleva ya dos meses. Una traqueotomía realizada para extraer un cáncer en su laringe lo mantiene con una válvula fonatoria, aparato que dificulta el habla de Richard.
El acuerdo marital fue facilitado por distintos estamentos del Hospital, especialmente por la Unidad de Servicio Social Clínico. “Todos aquí en la sala saben que la intención nuestra era casarnos y quisimos compartirlo con todos”, dijo Lilian con una alegría tranquilizadora, quien también tuvo palabras para agradecer al Regional de Concepción: “El hospital se portó ‘un siete’ con los permisos para realizar nuestro matrimonio”, aseguró.
Coincidentemente la pareja cruzó sus vidas en los pasillos del Guillermo Grant cuando Véliz concurrió a realizarse una angioplastia, 13 años atrás.
“Hemos pasado por varias cosas: altos y bajos”, recordó la recién casada, incluso socorriéndolo durante un paro cardíaco. La pareja, oriunda de Cañete, no se dio por vencida, y decidieron acompañarse mutuamente ‘hasta que la muerte los separe’.
“Estoy feliz”, agregó Richard a las palabras de su amada. “Desde un principio fue lo que siempre quise. El hecho de casarnos es la cúspide del amor, el respeto que nos entregamos, pero lo más importante es la tranquilidad que tenemos como pareja, y poder vivir así lo mejor posible esta vida”, dijo con esfuerzo el cónyuge y complacido usuario del HGGB. Su evolución es positiva y pronto podrán regresar a su parcela, en la Provincia de Arauco, felizmente casados.