“Específicamente, me formé en perfusión pediátrica y neonatal durante un año. Ahora estamos a la espera de la máquina (de oxigenación extracorpórea para neonatales) para realizar el soporte pediátrico y neonatal necesario para pacientes de 3 kilos de peso, por ejemplo. Ya tenemos programados otros pacientes de 10 años, incluso menores”, detalla la retornada enfermera, Mónica Gutiérrez.

Mónica ingresó al HGGB en 2015, comenzando su carrera en el Pabellón Central. Allí aprendió las distintas técnicas y pulió su manejo clínico, pero su atención se centró en el área cardíaca. “Cuando llegué al pabellón de Cardio empecé a aprender más, a meterme más en la parte de insumos, y apoyar en el área administrativa”, contó la joven. Al poco tiempo se le ofreció una oportunidad ineludible. “Mauricio y David, los dos perfusionistas de ese momento en el Hospital, estaban en búsqueda de un tercero, y pensaron en mí”, recordó.

Todo se “fue dando” según narró la joven reincorporada a las filas del Regional hace dos semanas, tras un periodo de perfeccionamiento de 12 meses en Alemania. Ahora dará soporte a las cirugías cardio pediátricas, iniciadas como nueva prestación el 7 de septiembre de este año.

“Lo que hacemos nosotros es mantener al paciente vivo: oxigenamos y perfundir todo el cuerpo del paciente”, explica Mónica sobre su especialidad. En estas cirugías se debe detener el corazón y la función pulmonar, he ahí la importancia de sus labores, “para que la sangre siga dando vueltas por el cuerpo (...) todo lo que dure la operación”, agrega.

Respecto a lo que palpó de la medicina germana durante su pasantía, Mónica dice: “nada que envidiarle a los alemanes. Nuestros cirujanos están muy bien capacitados y tenemos la misma tecnología. Pude ver también trasplantes pulmonares en Pediatría, asistencias ventriculares y una gama muy amplia de pacientes. Ahora esperamos que otro colega viaje a Europa y podamos tener al menos un backup de cinco perfusionistas, tanto para asistir pacientes adultos como pediátricos y poder rotarnos”, indicó.

Según estimaciones del centro cardiovascular HGGB, se espera realizar unas 100 cirugías cardíacas infantiles al año, una vez que el Ministerio de luz verde al recinto los casos del centro sur y austral del país, evitando enviarlos los centros capitalinos, entre los que se cuentan dos privados y dos públicos, habilitados en  intervenciones cardio pediátricas en Chile. “Queremos operar a esas guaguas acá y evitar mandarlas a Santiago”, dijo en completa motivación.