A las 6 am, del martes 7 de noviembre, el kinesiólogo Gerardo Torres y la enfermera Leslie Espejo de Pediatría, iniciaron desde el HGGB un viaje por tierra y mar hasta la Isla Santa María, frente a las costas de Coronel. ¿El objetivo? Dejar instalada en su casa a una guagua de sólo cuatro meses de edad, oxígeno dependiente, quien se convirtió en el paciente más pequeño con esta condición, asistido por nuestro personal, fuera del continente. Sólo tras su nacimiento en agosto pasado, los padres de Khareem Galloso supieron que su hijo tendría inconvenientes respiratorios. “Nació fisurado (con una conexión nasal y bucal interna) Empezó a tener episodios de apneas severas, lo que incide en su respiración y alimentación. Su vía aérea colapsaba sobre todo de noche”, relató el kine. Estuvo cerca de tres meses hospitalizado. Primero en UTI, luego en la Sala Avni para tratar su caso.

“Presentaba desaturaciones, estaba con oxígeno y nosotros empezamos a setear el oxígeno para ver lo que necesitaba e intentar colocar un ventilador mecánico, que no toleró”, agrega Torres. 

De ahí que la travesía a territorio insular fuera tan cuidado y con una coordinación de joyería suiza: “Tuvimos que cuadrar con el proveedor del oxígeno, con la gente del cesfam de Lagunillas, con los de la posta de la isla, con la Armada…, fue un tema logístico complejo, pero satisfactorio”, dijo Leslie, la enfermera que tuvo la misión de sortear algunos inconvenientes, incluso mar adentro. “Hubo que conseguir hasta una llave francesa para apretar la tuerca de una válvula del tanque de oxígeno. No podíamos fallar ni desajustar los parámetros que requiere el paciente”, agregó la profesional.

Instrucciones claras que indicaron a los padres del pequeño isleño, que se ha mantenido estable, tras su mejoría en nuestro recinto, pese a su condición. “El 6 de diciembre tiene control con maxilofacial porque ahora debe esperar cumplir -al menos ocho meses- para operarlo y que se cierre esa malformación, estabilizar su vía aérea y en la medida que va creciendo, debería ir mejorando y dejar la dependencia del oxígeno”.