Una semana intensa y lejos de terminar es lo que ha ocurrido durante los últimos cinco días en Oncohematología Pediátrica, Servicio que se adjudicó la semana entera para conmemorar el Día Mundial del Cáncer Infantil, cuyo momento más ceremonioso ocurrió este jueves.

En un emotivo acto en el Auditorio del CAA, el servicio repasó su historia e incluso entregó reconocimientos a la trayectoria de funcionarias y funcionarios, que cumplieron entre 25 y 31 años de metódicas labores brindando atención a pequeños/as pacientes con cáncer que han y siguen siendo atendidos en nuestra institución.

El director del Hospital, Claudio Baeza, dijo que “como institución es importante fomentar este tipo de actividades que nos une, nos pone de cara entre pacientes, organizaciones y funcionarios, quienes tenemos la más noble e importante de las responsabilidades: hacernos cargo de la salud de nuestros niños y niñas”. Por su parte, en representación del Servicio de Salud Concepción, Claudio Morales, destacó que está fecha “es un tema que remece a las conciencias y los compromisos, pero tenemos la obligación nosotros, como funcionarios de la salud pública, de llevar el tema a la mesa respecto a lo importante que es la detección precoz del cáncer y que la sociedad pueda entender que la humanización del trato es lo más importante”, comentó.

El momento más emotivo de la jornada fue la ceremonia de la luz, instancia que invitó a la reflexión y honra de aquellos pacientes que hoy no están junto a nosotros debido a esta enfermedad. Por todos ellos se encendió una vela, y entre todos los presentes lograron iluminar el auditorio en cálido naranja. El Momento culminó con la presentación del árbol de la vida, que permitirá a los familiares de estos pacientes colgar algún recuerdo de su ser querido. La pieza fue oficiada por la médico de familia, Francisca Marín. “El arbolito de la vida tiene como finalidad ser un símbolo que como servicio decidimos implementar este 2024. Con el buscamos recordar en nuestro quehacer diario, a aquellos niños, niñas y adolescentes que que han partido de nuestro lado físico y terrenal”, explicó la Dr. Marín.

Finalizado el acto, la Dra. Paola Olate, jefa de Oncohematología Pediátrica, reflexionó respecto a la actividad. “Estoy contenta, emocionada aún ya que fue una bella ceremonia de conmemoración. Entre papás, mamás, los niños y el equipo, llenamos el auditorio”, expresó con alegría. “Estamos contentos que los directivos hayan visto la realidad de lo que somos, un gran equipo”, añadió.