Se trata de un bebé gemelar nacido con 35 semanas, que fue sometido a una cardiocirugía pediátrica con la cual se trató una coartación aórtica con la que nació. Tras la intervención, se convirtió en el paciente más pequeño en ser sometido a este tipo de cirugías en nuestro hospital. También es el primero con estas características en ser atendido en la Unidad de Cuidados Intensivos del Servicio de Neonatología.

Para solucionar la estrechez presente en la arteria y permitir que la sangre circulara de manera normal a los órganos y extremidades inferiores del recién nacido, el cardiocirujano infantil, Rodrigo Reyes, realizó una incisión lateral en el pecho, para luego “resecar” la sección afectada y “reparar la aorta”. “Quedamos satisfechos con el resultado. Liberamos la obstrucción que había y en este momento se encuentra recuperándose en el Servicio de Neonatología”, contó el cardiocirujano infantil respecto al procedimiento. 

Horacio Contreras, jefe (s) del mencionado Servicio, se refirió a la estancia del bebé en la UCI Neo: “Para nosotros fue un desafío y una oportunidad poder recibirlo y hacer el post operatorio inmediato tras la coartación aórtica”, aseguró el facultativo. El prematuro ha evolucionado de forma satisfactoria en la UCI neonatal. “Hemos sido capaces de manejarlo de una manera adecuada, sin complicaciones”, destacó el facultativo.

El equipo de cardiólogos que lo supervisa se mostró tranquilo con la recuperación del neonato. “Hemos creado a través del tiempo un equipo con profesionales competentes y bien formados, lo que es esencial para dar respuesta segura a nuestros pacientes”, destacó la jefa del equipo de cardiología pediátrica de nuestra institución, Gloria Pérez.

Griselda Barrera, madre del pequeño, se mostró confiada del proceso resuelto en Concepción la mañana del 4 de junio, evitando su derivación hasta el capitalino hospital Calvo Mackenna, donde tradicionalmente se resuelven realizan los posts operatorios cardíacos complejos en menores de tan corta edad. “Sabía que estas cirugías eran en Santiago, por lo que ya me estaba programando para partir, pero tenía que ver qué hacer con mi otro bebé”, sinceró la mujer oriunda de Coronel. “A una semana de la operación estamos impecables”, agradeció.

El personal médico continúa con exhaustivos monitoreos al menor, entre los cuales se incluye saturación cerebral y general, además de presión arterial “en todas sus extremidades”, dijo el también cardiólogo infantil Freddy Sibada, cautelando siempre sus patrones hemodinámicos. “Podemos decir que salió de fase crítica. Ya está sin drogas vasoactivas, sin ventilación mecánica. Comenzó a comer, es un paciente que se ha portado un siete en su tratamiento”, concluyó el médico.