Hospitalización Domiciliaria HGGB celebró 7 años de atención
Lunes, 17 de Junio de 2024
al hogar de nuestros pacientes
Nacida en 2017 como una Unidad que da continuidad al tratamiento de pacientes que fueron atendidos en el hospital, pero que se les puede otorgar atención médica en la comodidad de su hogar, se creó Hospitalización Domiciliaria (Hodom), que cada 15 de junio está de aniversario.
“Ya son 7 años”, celebró la médico cirujano y jefa (s) de Hodom, Daniela Díaz. “Es un trabajo bastante movido. Tenemos que organizar de un día para otro los equipos que irán a los distintos sectores (...) pero siempre hay algo que surge entremedio y tenemos que estar todo el día en función de reorganizar las visitas y acomodarnos”, contó la facultativa sobre la coordinación necesaria para el funcionamiento de Hodom.
De esta forma los múltiples móviles con los que cuenta la unidad, distribuyen cada semana al personal que cumple labores en la casa situada en Barros Arana #1556. Desde ahí se dirigen a domicilios de pacientes ubicados en Concepción, Hualpén, San Pedro, Chiguayante y Hualqui, sin discriminar condición social.
Compuesta de enfermeras/os, Tens, kinesiólogos/as, fonoaudiólogas/os, terapeutas ocupacionales y trabajadora social, Hodom divide su trabajo en un sistema de cuatro turnos, desde las 6:00 de la mañana, hasta la medianoche, “para dar atención a los pacientes que requieren visitas para sus tratamientos de tres veces al día, cada ocho horas”, indicó Díaz.
“Tratamos de cubrir lo mismo que hace el hospital. Vemos alrededor de 7 u 8 pacientes diarios por equipo”, dijo la enfermera, Melissa Venegas sobre la cobertura usuaria diaria. Respecto a la forma en que se desarrolla comentó que lo que más complica son “los tacos”, especialmente “los de los lunes y los viernes”. “En la Unidad andamos todos bien rápido, el tiempo se nos hace nada. Hay mucho que hacer y en los domicilios tenemos que adecuarnos a lo que el hogar del paciente ofrece”, explicó sobre su trabajo.
“Se creó como un programa del Servicio de Medicina después del terremoto de 2010, solamente con un médico una enfermera y una Tens”, recordó Sandra Venegas, Tens de la Unidad. En 2014 se extendió la proyección de sus funciones, pero fue finalmente en 2017 cuando se conformó como un equipo propio, el cual da atención a pacientes Fonasa o pertenecientes al Programa de Reparación y Atención en Salud (Prais). “El tipo de paciente que ingresa a Hodom dependerá del diagnóstico del médico”, siendo los facultativos quienes deciden qué pacientes pueden recibir esta prestación del HGGB.
El julio del año pasado se incorporó más equipo administrativo, compuesto de secretaria y trabajadora social. “Dado los distintos sectores que atendemos y la cantidad de pacientes, debemos responder a distintos requerimientos”. Para esto, Hodom colabora con la entrega de diversos insumos, pero también “orientamos respecto a servicios sociales, uno de ellos es la gestión del Carné de Discapacidad”, explicó la trabajadora social de la Unidad, Maritza Torres.
La Tens Dayar Marmaduque, explicó que uno de los roles principales de Hodom es su contribución a despejar el hospital, “ya que se atiende a personas en buenas condiciones dentro de sus patologías”, conservando las camas del recinto de salud “para pacientes más críticos”. “Además, se mejora la adherencia al tratamiento y da la impresión que se mejoran más rápido al estar en su entorno junto a la familia”, añadió, algo que ayuda especialmente a los adultos mayores.
Integración familiar del equipo Hodom
Un punto en común al que llegan las y los funcionarios de Hospitalización Domiciliaria es la cercanía que logran con muchos de los pacientes atendidos directamente en sus domicilios. “Nos ayuda a involucrarnos un poquito más con ellos”, reflexionó Marmaduque. “El trato es más cercano y uno se va haciendo parte de las familias por la cantidad de visitas que tenemos en el día”, explicó.
Una sensación similar tiene Venegas. La enfermera dijo que “al ingresar al domicilio, es donde está la zona de confort del paciente. Muchas veces ellos nos esperan para darnos regalos, como chocolates, galletas o cosas del campo, aunque por protocolo nosotros no podemos aceptar. Aquellas muestras de cariño hacen que me sienta feliz, contenta y agradecida”, añadió.
La terapeuta ocupacional, Valentina Montoya, indicó que las visitas a domicilio ayudan a que las familias se vean más comprometidas respecto al integrante que requiere cuidados médicos. “Lo beneficioso es que trabajamos junto a la familia, los educamos en todo sentido respecto a sus tratamientos”, aseguró.